“Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no dije nada porque no era comunista. Después vinieron por los socialistas y los sindicalistas, y yo no dije nada porque no era lo uno ni lo otro. Después vinieron por los judíos, y yo no dije nada porque no era judío. Después vinieron por mí, y para entonces ya no quedaba nadie que pudiera decir nada en mi favor”
Martin Niemoeller (pastor protestante, 1892-1984).
En un momento como el actual, en el que cada día se vulneran los derechos e intereses de distintos colectivos sociales, esta frase, erróneamente atribuida a Bertold Brecht, mantiene por completo su vigencia.
Durante años la gente se ha asombrado de que pudiera haber ocurrido el holocausto judío; pues aquel horror empezó como empiezan todos los horrores: con el silencio cómplice de la gente buena. Actualmente Grecia está viviendo un genocidio económico al que llaman rescate. Y España va por la misma senda. ¿Dejaremos que ocurra?